Las mujeres en concreto han recibido una información sexual limitada, que conlleva un mensaje velado: No son seres sexuales. A este desconocimiento, se le suman mensajes negativos que la mujer recibe generalmente durante los primeros años, y que crean una forma de relacionarse con sus órganos reproductores muy compleja. Algo que no le pasaría con el resto de su cuerpo.
La sexualidad se va construyendo junto con la identidad de género, asimilando las reglas que con respecto a la sexualidad se otorgan de manera diferente a hombres y mujeres. Por influencia judeo-cristina católica se ve a la mujer en forma dual, la buena y la mala María y Eva, y esto ha influido en el disfrute y placer sexual de las mujeres. Si las mujeres se apoderan de su sexualidad a través del autoconocimiento y autodeterminación, los cambios que esto genera pueden ser benéficos para ellas como para sus parejas. Sexualidad se refiere a una dimensión fundamental del hecho de ser un ser humano: Basada en el sexo, incluye al género, las identidades de sexo y género, la orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva y el amor, y la reproducción. La sexualidad es el resultado de la interacción de factores biológicos, psicológicos, culturales, socioeconómicos, éticos y religiosos o espirituales. Otro momento importante en la adquisición de la identidad de género se da alrededor de los 3 años, en donde el niño o niña han formado un concepto de sí mismos y saben si son niñas o niñas. Esto surge antes de la conciencia de las diferencias anatómicas entre los sexos. La asignación de roles se aprenden desde temprana edad y es un proceso que se da a lo largo de la vida de acuerdo a la sociedad, cultura, nivel económico o contexto histórico. Estos procesos, en su conjunto, forman e integran la identidad de género con sus diferencias para hombres y mujeres.
Sin embargo, es un hecho que el amor entre mujeres se extiende desde la mejor amiga hasta la pareja sentimental y que los límites son flexibles. Nuevamente se pone de manifiesto la cultura patriarcal masculina en las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo femenino. Para aquellas que consideran que existe una identidad lesbiana, es el deseo de un cuerpo femenino. Para otras, es una alternativa a la falta de entendimiento y sensibilidad en sus relaciones con los hombres. Así, las mujeres que sólo se sienten atraídas por otras mujeres generalmente chocan con una falta de entendimiento social y familiar, ya que la sexualidad femenina es invisibilizada e ignorada y su sentido patriarcal no es el deseo sino la maternidad. Muchas de las mujeres que se reconocen como lesbianas lo descubrieron muy pronto. También en estas relaciones entre mujeres, nos encontramos que frecuentemente se establecen roles activos y pasivos, pasando a clasificarse a las lesbianas como femeninas y masculinas.
Discípulo Morado. Denial tienes abstracción de la suerte que tienes por denial adeudar comunidad extendida. Yo vengo.
Invitarte a que te hagas una pregunta aparte. Todavía que. Muestra anatomía genuina y semejante cual es. Sé atenta. Demuéstrale interés. Empero denial te.